viernes, 30 de enero de 2015

He encontrado mi rinconcito en el cielo

Y es que con el pasar de los años y las múltiples visitas que he hecho que le he tomado tanto cariño y amor a ese mágico lugar donde te olvidas de todo, donde el clima es agradable en cualquier estación del año, donde vives alegremente, donde conoces gente buena, donde el trato es más que amable, donde puedes escuchar tanto buena música, excelentes historias y chistes al por mayor, casi todos de vivencias locales pero que al escucharlas no puedes evitar la carcajada y adoptar la frase para futuras ocasiones.
La comida, es otro de los lujos que te puedes encontrar ahí, no serán manjares pero saben como tal, la bebida…..bueno que les digo, eso nunca hace falta de hecho hasta sobra, pero lo más importante para mi es la compañía, el rato  ameno, la libertad y tranquilidad que ahí se respira.

Para mi mala fortuna solo puedo ir cada año por cuestiones de trabajo, pero hay días y temporadas en las cuales añoro y deseo estar nuevamente en tan fabulosa tierra. Quien me conoce diría que es raro, que yo no soy de rancho y que soy más de ciudad, posiblemente tengan razón, digamos que en un principio no era mucho de mi agrado, hoy en día todo ha cambiado, las ganas de regresar están presentes de manera constante.  Tan solo al llegar las vacaciones se me hacen eternos los días para emprender el viaje, la sonrisa y el buen humor me acompañan durante todo el trayecto y justo cuando voy pasando la caseta de Puebla ya se puede ver el Popocatépetl y parte del Iztaccíhuatl. Las ansias se apoderan de mí, un poco por lo cansado del viaje pero en mayor parte por las ganas de ya estar en San Luis Chalma, muy cerca de Izucar de Matamoros, en el mero estado de Puebla.

El tiempo corre rápido, pero uno hace todo lo posible para que los días duren al máximo, de verdad nunca creí que esto me fuera a pasar, el enamorarme de un lugar donde yo puedo sentirme relajado, tranquilo, feliz y estimado. Hago completamente de todo, mientras me inviten a conocer, a salir, a comer, a platicar y disfrutar de todo lo que para mí fue desconocido pero maravilloso. Un lugar donde estoy seguro y si la vida me da tiempo será mi lugar predilecto en la tierra que por lo pronto es un encantador lugar para pasar un buen retiro.


Yo lo llamo……mi rinconcito en el cielo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario